Claves para detectar la depresión infantil
La depresión infantil se acuña por primera en 1987. Hasta entonces no se había considerado que esta pudiera afectar a la infancia. Muchas veces los indicadores de depresión se confundían y se confunden en el niño/a con: desgana, poca fuerza de voluntad o vaguedad.
Sin embargo más allá de un diagnóstico en depresión es importante que atendamos a los cambios que el niño/ niña presenta y que nos indican que «algo no va bien». No es simplemente que el niño/ niña «no tiene ganas«, «esta desmotivado/a» o «no quiere hacerlo«. Muchas veces el niño/ niña muestra una pérdida de motivación por las cosas como respuesta a algo que le esta pasando. Esa es su manera de mostrar que «no se encuentra bien» y que no sabe o no puede gestionarse emocionalmente o gestionar la situación. Sus emociones se impregnan de tristeza constante (que no puede manejar) y su comportamiento pasa a ser más lento, con menor atención y concentración a las actividades que realiza porque está centrado en lo que no puede gestionar a nivel emocional, actitudinal y de comportamiento.
Algunos indicadores que nos pueden decir que un niño/ niña muestra signos de depresión son:
- Duerme poco o demasiado.
- Tiene menos o más apetito de lo que había presentado anteriormente.
- El peso puede disminuir o aumentar de forma rápida.
- Su ritmo es más lento.
- Presenta dolores de cabeza, abdominales, vómitos y nauseas constantes.
- Realiza menos actividades y no le apetece probar otras nuevas.
- Puede haber una pérdida casi total de las actividades tanto placenteras como de obligación.
- Menor atención y concentración.
- Problemas de memorización.
- Deterioro en los estudios.
- Quejas de dolor, preocupaciones, tristeza, culpa, etc.
- Variaciones en las muestras de alegría.
- Aumento de la irritabilidad y el enfado.
- Muestras de agresividad unidas a periodos de silencio.
- Menor habla y comunicación.
- Pensamientos de escaparse de casa o el colegio.
Si tu hijo/ hija presenta varios de estos indicadores puede estar pasando por un periodo depresivo, por tanto es importante actuar. En este sentido será clave la educación emocional entre otras actuaciones. Aprender a saber, entender y gestionar lo que siente será fundamental para que aprenda a hacer frente a lo que pasa. Educar de manera consciente desde las emociones, la actitud y la acción.
Raquel Bañuls Directora EDI psicólogos. Coord. Área Educativa.
¡Descárgate nuestra guía sobre cómo lidiar [emocionalmente] una rabieta!
¡En tan solo 6 pasos!
¡Enviado! Revisa tu bandeja de entrada o en SPAM y ahí lo encontrarás ;)
Al apuntarte a nuestra lista confirmas recibir E-Mails de Edi Psicólogos. Puedes darte de baja en cualquier momento. Más información en nuestra Política de privacidad.